NOTA: La presente poesía tiene
dos versiones, una original y otra editada. Se transcriben ambas a
continuación:
JORDAN
Enseñó con bonhomía, buen profesor
Los valores morales que abundaban en
su corazón
Economía, política y cultura
todas basadas en la Verdad
Que supiste transmitir con excelsa
claridad.
Tu fuerte la filosofía
Como regalo de Dios
En el legado de fe en Cristo Nuestro Señor.
La dirigencia formaste, sólo por
seguir los Principios
En que la Patria se cimentó.
Nunca quiso ser centro,
Siempre causa instrumental,
Como instructor del verdadero Camino
Que nos conduce a la Patria Celestial.
La austeridad, humildad, gentileza
Demostración de grandeza, ejemplo y
demostración
De que el motor y causa primera
Es únicamente el Señor.
El amor a la Patria supiste inculcar.
En octubre un día se nos lo
arrebató
Dejo, sublimemente la vida
Para unirse al
Creador.
Con su corona y martirio
La sangre vertida con convicción
Jordán Bruno ha dado la llave de
trascendencias
En las divinas esencias que llevan al único Dios.
Claramente no a la violencia y en la
lucha permanente
Contra el enemigo atroz
Que rechaza la Doctrina ordenada
Bien común, acto y potencia
ordenada por el Padre Dador.
Siempre es “ arrancar por
definir”
Pero de Genta no se puede más que
decir
CRISTO HASTA MORIR
Octubre de 2014. Al cumplirse 40
años de su martirio
-AGA La Plata-
Asociación Gentista de La Plata
VERSIÓN EDITADA:
JORDÁN.
Enseñó con bonhomía,
fue un excelso profesor
de las virtudes morales
que desbordaron su corazón.
Predicaba ortodoxia en Teología,
y conocimientos fundamentales
de economía, política y cultura,
todos basados en La Verdad,
los cuales supo transmitir
con prístina claridad.
Fue fuerte en filosofía,
como un regalo de Dios
para difundir el legado de Fe
en Cristo Nuestro Señor.
La dirigencia formó,
siguiendo los Principios
en que la Patria se cimentó.
Nunca quiso ser el centro,
siempre causa instrumental,
como instructor del verdadero Camino
que nos conduce a la Patria Celestial.
Austeridad, humildad, gentileza
ejemplo de grandeza, y demostración
de que el Motor y Causa Primera
es únicamente el Señor.
El amor a la Patria supo inculcar.
Un día de octubre se nos lo arrebató,
y dejó sublimemente esta vida
para unirse al Creador.
Con su corona y martirio,
sangre vertida con convicción,
Jordán Bruno ha difundido
la llave de trascendencia
en las cifras de eternidad,
que son las esencias
señalando al único Dios.
Claramente convocó
al uso veloz de la fuerza,
con orden y valentía,
respetando la jerarquía
en la lucha permanente
contra el enemigo atroz
que rechaza la Doctrina cierta,
y el Bien común, como acto y potencia
ordenados por el Padre Creador.
Siempre enseñó “ arrancar por definir”
Pero de Genta no se puede más que decir:
¡CRISTO, HASTA MORIR!
Octubre de 2014.
Al cumplirse 40 años del martirio
de Jordán Bruno Genta